El domingo, Ucrania pareció lanzar una contraofensiva largamente esperada contra las fuerzas rusas, y sus funcionarios dijeron que Moscú había volado la presa para impedir su avance al causar inundaciones y cortar el único cruce de río que quedaba entre los enemigos. Sin embargo, no está claro si los planes de Ucrania incluyen un cruce importante del bajo Dnipro.
Los ucranianos cuestionaron por qué querrían destruir su propia infraestructura, pueblos y granjas, y señalaron que estos han sido objetivos frecuentes en la brutal guerra de los rusos. Moscú quería «demostrar que está listo para cualquier cosa» si Kiev lleva a cabo agresivamente su contraofensiva, dijo Roman Kostenko, presidente del comité de defensa e inteligencia del parlamento ucraniano. «Están haciendo todo lo posible para detener nuestro contraataque».
Peskov, el portavoz del Kremlin, afirmó que Ucrania había destruido la presa para cortar el flujo de agua a través de un canal desde el Dnipro hasta la península de Crimea. Después de que Rusia anexó ilegalmente Crimea en 2014, Ucrania detuvo el flujo, pero Rusia lo reinició el año pasado después de tomar la represa.
Otros funcionarios rusos afirmaron que el ataque tenía la intención de apoyar una ofensiva ucraniana que, según dijeron, estaba chisporroteando, posiblemente para permitir que Kiev reposicione algunas fuerzas o para hacer que las inundaciones hagan retroceder a la artillería rusa cerca del río.
Algunos analistas militares occidentales han advertido en contra de tratar de asignar culpas rápidamente, o incluso decir si el colapso de la represa fue intencional.
«Es demasiado pronto para decirlo», dijo Michael Kofman, director de estudios rusos en CNA, un instituto de investigación en Arlington, Virginia. El desastre, dijo, «finalmente no beneficia a nadie».
El informe fue proporcionado por Riley Mellen, haley willis, Thomas Gibbons Neff, Pablo Sonne, Andrés E. Kramer, Mateo Mpoke Bigg, eric schmitt Y kim victoria.
